Con el pasar del tiempo todo ha ido cambiando gracias a los avances de la tecnología. Las colecciones de álbumes de cromos no escapan a esta tendencia.
Actualmente, las compañías editoriales que emiten estas colecciones lo hacen de manera virtual. En otras palabras, el álbum lo tendrás en una página web y no en físico.
Un ejemplo de estas compañías es Panini, líder mundial en este tipo de actividad relacionada con cromos coleccionables con colecciones de futbol. Como la Eurocopa, la Liga Santander en España, NBA, Harry Potter, Dragon Ball, Fortnite y muchas otras.
Incluso Panini está incursionando en el Blockchain con unas trading cards de los famosos jugadores de futbol de la liga española. Esto es solo el inicio del fin de los cromos impresos.
Álbumes virtuales
Primero ingresas a su página web. Luego de crear el usuario comienzas a abrir una cantidad limitada de sobres diarios. Que puede ser incrementada si respondes preguntas como recompensa de tus conocimientos.
Además, se pueden crear o unirte a grupos para cambiar tus cromos digitales repetidos. De esta manera, puedes solicitar cromos en específico o equipos. Cabe destacar que el algoritmo se encarga de buscar tus requerimientos y cada cierto tiempo te notifica si ha conseguido alguno.
Con esta tecnología el usuario llena el álbum y lo puedes descargar a tu dispositivo para llevarlo adonde quieras. Pero no tienes contacto con ningún usuario y no conoces a nadie. ¡Esa era la magia de los álbumes impresos!
La magia de los impresos
Van en vías de extinción, pero no se puede negar la magia que se generaba cuando se coleccionaba algún álbum que a uno le gustaba. Solo por mencionar algunos, estaban los álbumes de Mazinger Z, Transformers, He-Man, Michael Jackson y muchos más.
Se iniciaba normalmente comprando el álbum y unos pocos sobres. Al tener cromos o barajas repetidas se comenzaban a cambiar con amigos en la casa o en el colegio. También los conseguías en lugares como quioscos y plazas, en donde las personas se reunían para intercambiar los cromos.
En ocasiones las compañías no emitían algunos cromos hasta que hubiesen vendido una buena cantidad. Luego de un tiempo comenzaban a aparecer los cromos difíciles y los coleccionistas podían terminar de llenar sus álbumes.
Ahora bien, esa es la magia de coleccionar los álbumes de cromos impresos, porque puedes conocer personas y hacer nuevos amigos. Además, pones a prueba tu cerebro cuando memorizas los cromos que tienes para lograr conseguir los que faltaban.
Toda una experiencia que pasará a la historia. Coméntanos ¿Te gusta coleccionar álbumes de cromos? ¿Prefieres los impresos o los virtuales?
Imagen: Qhero.net
